sábado, 12 de enero de 2008

que es reiki



El término Reiki (霊気 o 靈氣) es una palabra japonesa . REI significa "universal" y hace referencia al alcance y la naturaleza de esta práctica, y KI significa "energía vital fundamental", de modo que la palabra Reiki se puede entender como la energía universal de la vida.
Reiki es un método japonés de sanación mediante energía natural que permite sanar enfermedades físicas y mentales. Mikao Usui fue quien descubrió el Reiki durante un retiro espiritual a mediados del siglo XIX, aunque él siempre afirmó que únicamente redescubrió una técnica de sanación milenaria que ya existía pero que debía llevar mucho tiempo olvidada.
La práctica del Reiki se fundamenta en un emisor o canal que, mediante sus manos, transmite Reiki (energía vital) a un receptor que puede ser él mismo u otra persona con el fin de paliar o eliminar molestias y enfermedades; no obstante, gracias a que Reiki es una energía universal los tratamientos también pueden dirigirse a otros seres vivos como animales e incluso plantas .
Los efectos curativos del Reiki parten de los conocimientos hinduistas sobre los Chakras, mediante los cuales explican los estados de salud de los seres humanos. De esta forma, el mal funcionamiento o bloqueo de uno o varios Chakras provoca o agrava el mal estado de salud dando lugar a enfermedades y trastornos. La energía Reiki se dirige a estos chakras cuando se aplica a un receptor enfermo, desbloqueándolos y potenciando el proceso de recuperación del receptor.
Aunque Reiki es una técnica de sanación, no se recomienda utilizarla como sustituto del tratamiento médico prescrito por un profesional, aunque sí se puede utilizar de forma complementaria.
El doctor Mikao Usui estableció una filosofía para el Reiki basada en los Principios del emperador Meiji, e invitó a sus alumnos a seguirla. Éstos son los Cinco Principios del Reiki:
- Sólo por hoy no te preocupes
- Sólo por hoy no te enojes
- Honra a tus padres, maestros y ancianos
- Gana tu pan honradamente
- Muestra respeto y gratitud hacia toda forma de ser vivo

viernes, 11 de enero de 2008

sanacion con cristales


La sanación con cristales está resurgiendo en nuestros días y tendrá un papel muy importante en nuestro futuro. Mientras los tiempos cambian y el cuerpo humano experimenta otra etapa de evolución nos volvemos más sensibles a ciertos tipos de energía de los que nunca antes hemos sido conscientes. Muchas personas de repente han desarrollado una atracción por los cristales, sin explicación alguna, esto se debe a la necesidad de experimentar otros tipos de vibración y aceptar la ayuda que el universo nos ofrece a través de diferentes caminos para nuestro desarrollo espiritual.
El conocimiento acerca de la ayuda que nos prestan los cristales en cualquier aspecto de nuestra vida es muy antiguo. Civilizaciones avanzadas del pasado como los Incas, Mayas y los Nativos Americanos usaban los cristales para sanación y también para comunicarse con la Tierra y el Universo. La Turquesa, por ejemplo, era muy usada en ceremonias espirituales; la Angelita les ayudaba a conectar con dimensiones angélicas mientras que el Lapislázuli les ayudaba a elevar la conciencia hacia la realidad espiritual superior.
Ahora que la gente se está reconectando con el conocimiento perdido, estamos retomando nuestro potencial y aprendiendo a trabajar con los elementos de nuestro planeta en lugar de confiar sólo en soluciones químicas elaboradas artificialmente. El número de tiendas, libros, seminarios y demás acerca de cristales es bastante mayor que el de hace sólo 20 años. Comprar un cristal por sus poderes sanadores se está volviendo muy popular estos días. También hay muchas personas que buscan piedras que les ayuden en ciertos aspectos de la vida (finazas, salud, relaciones personales, etc.) El poder de los cristales, si se sabe utilizar correctamente, puede ayudarte en cualquier aspecto de la vida.
Existe una gran variedad de cristales, de diferentes tamaños, formas y colores con distintas propiedades que pueden aplicarse tanto para la sanación como para meditar, ayudar a la canalización, para potenciar la conexión con otras dimensiones y mundos, para tratar comida, limpiar el aura y cargar de energía el cuerpo, desbloquear los chakras e incluso para potenciar otros tipos de terapias como el Reiki y los masajes.
Las vibraciones de los cristales trabajan para elevar tus propias vibraciones y limpiar la energía del cuerpo. Es muy bueno tener Malaquita si estás tratando de superar una profunda herida emocional o trauma. Si te sientes cansado, prueba usando joyas de Cornalina que te dará energía física y creativa. Si quieres un flujo constante de energía, puedes llevar siempre contigo una bolsita con piedras pulidas o cargarte cada mañana con una vara de cristal. Mientras un cristal permanezca dentro de tu aura, estará produciendo un efecto positivo. Las esferas grandes, los obeliscos y los grupos de piedras se usan para llenar una habitación de vibraciones positivas.
Como regla general, mientras más grande sea el cristal, más vibraciones sanadoras producirá. Asegúrate de elegir el tipo y forma correctas de cristal para tu propósito. La aventurina y citrino, por ejemplo, son los mejores cristales para la abundancia financiera y el flujo de dinero. La Amatista es uno de los cristales más vendidos en las Exposiciones Espirituales y Metafísicas porque es un gran receptor de la Energía Universal. Una pirámide de Amatista colocada en el lugar en que meditas puede aumentar significativamente las vibraciones espirituales, y si sostienes un huevo o una esfera de Amatista mientras meditas te ayudará a elevar tus vibraciones hasta llevarlas a dimensiones espirituales más altas.
Hay muchas formas de elegir un cristal, muchas veces se dice que es el cristal quien elige a la persona y no viceversa. El cristal que más te atrae es usualmente el que será más beneficioso para ti, así que, si hay un cristal que ha captado tu atención más que los otros ¡no lo ignores! Hay una razón para esa atracción, tal vez no sea el cristal más bonito, pero sus vibraciones han conectado con las tuyas y ese cristal puede prestarte una gran ayuda. Tocar y sostener un cristal en tus manos es una parte crucial al conectar energías con la piedra. Date cuenta de las sensaciones, vibraciones o cualquier cambio que ocurra en tu cuerpo, mente y espíritu mientras sostienes el cristal. Tu mano receptiva (izquierda si eres diestro y derecha si eres zurdo) usualmente percibe más fuertemente estas energías vibratorias. Sigue tu intuición, y ten cuidado cuando manejes los cristales porque son muy frágiles.

TERÁPIAS Y CURSOS DE REIKI EN NAHUALA


El reiki es una terapia complementaria japonesa basada en la imposición de manos para
equilibrar la energía a través de los chackras.

El reiki es un complemento a la medicina alópata, tal y como ha sido demostrado en muchos hospitales, como elemento importante a la hora de controlar el dolor, siendo especialmente efectivo en casos de STRESS LABORAL, DEPRESIÓN, ANGUSTIA, CRISIS DE PÁNICO.
La práctica del reiki está reconocida por la organización mundial de la salud (OMS)

Te abrirá a nuevas experiencias en el camino de la evolución personal. Pruébalo.
nahuala
tienda y centro de terapias
C/Lepant,304 bjos
telf 931659473

CAUSAS ROFUNDAS DE LAS ENFERMEDADES


CAUSAS PROFUNDAS DE LAS ENFERMEDADES
Es este Yo Esencial el que está relacionado con las viejas preguntas filosóficas acerca de quiénes somos, de dónde venimos y hacia dónde vamos. Es con este Yo Transpersonal con el que se conectan los sujetos en un trance místico o en estados alterados de conciencia especiales. Es un estado de conciencia expandido en que se experimenta una gran sabiduría, una sensación de conexión con todo lo creado ya sea otros seres humanos, flora, fauna, objetos, etc. También se experimentan una paz, tranquilidad, felicidad y amor indescriptibles.La sabiduría de esta personalidad espiritual, busca influir para que nuestra personalidad inferior avance y evolucione lo mejor posible en este camino de crecimiento personal que está ligado a la superación de nuestros bloqueos emocionales, defectos, malos hábitos y patrones incorrectos en la estructura de nuestra personalidad.
Según el Dr. Edward Bach, (redescubridor del poder terapéutico de las esencias florales), el desencuentro entre los objetivos que persigue estas personalidad superior y las decisiones erradas que adopta nuestra personalidad inferior, es lo que determinan en gran medida la aparición de enfermedades específicas en el ser humano.
Al igual que los sueños las enfermedades representan mensajes simbólicos, a través de los cuales nuestro Yo Esencial o Transpersonal nos alerta y nos llama la atención para que nos demos cuenta de que ha llegado el momento de que tenemos que hacer cambios radicales en nuestras vidas, precisamente en estas conductas y hábitos que son contrarios a nuestro crecimiento espiritual Pero así como no es fácil interpretar nuestros sueños, tampoco es fácil entender qué nos quiere decir el tipo de enfermedad que estamos experimentando. (Sugerimos como una valiosa ayuda en este aspecto el libro de Louise L. Hay " Sana tu cuerpo")Desde este punto de vista cobra un gran significado la ubicación de la dolencia dentro del cuerpo, su cronicidad, su intensidad, su duración y su aparición en ocasiones después de un evento traumático. Para descifrar estos mensajes simbólicos de la enfermedad nos damos cuenta entonces que el paciente requiere de mucha ayuda, porque además no se percata que ha sido él mismo quien ha propiciado la aparición de su enfermedad y por otra parte para complicar más las cosas, su personalidad inferior, sus egos, su estructura de personalidad, su coraza defensiva, por naturaleza se resisten tremendamente a los cambios. Es increíble comprobar como muchos pacientes en el fondo, subconscientemente no quieren sanarse, prefieren ganancias secundarias como el inspirar lástima, llamar la atención, inducir el amor de sus parientes y cercanos, o pagar culpas auto asumidas y muchas veces irreales, porque esto les resulta más fácil y más cómodo. Les es mucho más difícil e incómodo aceptar el desafío de empezar a corregir sus actitudes incorrectas o inadecuadas.Decíamos entonces que para vencer estas dificultades intrínsecas de la condición humana, el paciente requiere mucha ayuda al tiempo que necesita estar informado de esta realidad para poder desarrollar una voluntad adecuada y poner lo necesario de su parte para poder revertir sus enfermedades. Dentro de la ayuda que todo paciente debiera recibir, necesitaríamos que los médicos además de concentrarse en temas exclusivos de sus especialidades, tuvieran un manejo mínimo de una psicología básica que contemple estos aspectos citados, y de los temas bioenergéticos de fondo que subyacen en toda enfermedad.Ojala a futuro tuviéramos médicos informados en todos estos decisivos factores, que idealmente también supieran trabajar en equipo, por ejemplo, con psicólogos transpersonales y terapeutas energéticos para llegar a una verdadera sanación de los casos graves. Nos referimos especialmente a los psicólogos transpersonales porque tal como citamos, es la Psicología Transpersonal la que ha logrado llegar a estas realidades más profundas de la esencia humana. Desgraciadamente la Psicología Transpersonal al igual que las terapias alternativas todavía no son bien comprendidas, ni aceptadas por la gran mayoría de la comunidad académica. Son más difundidas las modalidades de la psicología psicoanalítica, cognoscitiva, conductista, etc.Es por esto que saludamos con gran satisfacción y reconocimiento a la valentía de los directivos académicos de la Universidad del Pacífico, que han creado una carrera de Psicología con especialización en Psicología Transpersonal. Pensamos que hay aquí un progreso adelantado a su época que es lo que demandan los tiempos especiales que vivimos.
A partir de lo anterior es que se vislumbra el gran problema de la medicina convencional. Se ha acostumbrado al paciente a que por el dinero que cancela a su médico, éste debe recetarle ciertas píldoras mágicas que terminen con su enfermedad, idealmente y en lo posible con el menor esfuerzo o incomodidad de su parte. El paciente entonces transfiere toda responsabilidad al médico y no se hace cargo, pues el sólo es una "víctima" de su dolencia. El médico debe ser, pues, el único encargado y responsable de su sanidad, para eso ha estudiado en la Universidad y para eso se le paga. El problema con este criterio es que el paciente no se percata del mensaje que hay detrás de cada enfermedad. Luego no se responsabiliza ni asume la necesidad de cambio que se requiere para aprender la lección y poder sanar.A partir de esta situación en que el paciente no llega al meollo de su problema, es que muchas enfermedades se hacen crónicas y se perpetúan en el tiempo.Es aquí donde observamos las graves falencias del actual sistema de la medicina convencional. Cuando observamos la gran cantidad de enfermedades como el reumatismo, esclerosis múltiple, cáncer, SIDA, o enfermedades mentales como la esquizofrenia, las depresiones bipolares, las crisis de pánico, etc., donde la medicina muchas veces proporciona solamente un alivio farmacológico pero pocas veces se llega a revertir el problema. Queremos sin embargo dejar en claro que las críticas que hacemos al actual sistema pretenden ser lo más constructivas posibles. Destacamos también, por otro lado, todos los avances que la medicina ha tenido en distintas áreas, como por ejemplo, en las reparaciones quirúrgicas de los órganos afectados en distintas especialidades. La cirugía muchas veces representa la única posibilidad de salvar la vida a un paciente, y en esto ha habido un gran perfeccionamiento.Como profesionales de la salud alternativa, en caso de sufrir un accidente nos gustaría que nos llevaran rápidamente a un centro de atención de urgencia, en lo posible incluida la UTI, y no donde un terapeuta alternativo, por supuesto.La fertilización in vitro, los trasplantes, los implantes, los antibióticos, los avances en los instrumentos médicos de diagnóstico, los perfiles bioquímicos, la resonancia magnética, y muchos otros adelantos han permitido remediar problemas y prolongar el índice de vida media de las personas. El inconveniente es que esto no siempre está aparejado con el índice de calidad de esta vida, lo que se resiente especialmente en enfermedades de evolución lenta donde hay sólo paliativos.Es en este ámbito donde las mal llamadas medicinas alternativas, tienen que entenderse como complementarias, y darnos cuenta del aporte trascendental que pueden hacer para llegar a niveles de sanación más profundos y duraderos. También es importante percatarnos de la utilidad que tienen en el área de lo que se ha dado en llamar medicina preventiva, es decir favoreciendo condiciones saludables que impidan llegar a la forzosa necesidad de las intervenciones quirúrgicas.
Tenemos que comprender que lo decisivo en el proceso de recuperar nuestra salud, es cuando se activan las capacidades autocurativas que todos tenemos a niveles muy profundos: podríamos denominar esto como la activación de nuestros "sanadores internos"Es así que en muchos casos donde la enfermedad es de mediana intensidad, leve o incipiente, basta con el mecanismo tradicional de la medicina, en que el paciente llega esperanzado ante el médico al cual él ha puesto en un sitial privilegiado, y en quien confía como su gran salvador. Luego este profesional le receta unos medicamentos estupendos que además le alivian rápidamente sus síntomas molestos. En muchos casos y como decíamos cuando el problema es leve, esto es suficiente para que se despierten en este paciente sus mecanismos autocurativos, sus sanadores internos, y recupere así totalmente su salud. Vemos aquí operando un mecanismo de placebo y sugestión que actúan a nivel del subconsciente del enfermo y logran su objetivo.Sin embargo desgraciadamente también nos encontramos con muchísimos casos en que el problema es más grave, porque hay traumas psicológicos más profundos, o hay actitudes erróneas que deben ser cambiadas, y aquí entonces el mecanismo de la píldora mágica no da resultado y la enfermedad se vuelve crónica. Ocurre luego el agravante de que al insistir el médico en suministrar los fármacos que él cree que son los que curan, se van acumulando las toxinas y los efectos secundarios de estos medicamentos, que por ser químicamente sintéticos, van a contrapelo de la química normal, natural y equilibrada del metabolismo de las células humanas. Este organismo humano es una máquina tan maravillosa y compleja, y además está movida por una inteligencia tan formidable que se defiende de estas toxinas y venenos con gran habilidad. Así se explica como resistimos por años, el cigarro, las drogas, los medicamentos, los psicofármacos, el alcohol, la contaminación del aire, del agua y la comida, etc. Pero más temprano que tarde, los efectos secundarios de estos remedios y sustancias químicas, se hacen notar agravando el problema de salud original hasta llegar a intoxicaciones medicamentosas severas que colapsan a los órganos encargados de la limpieza y desintoxicación como el hígado, los riñones y el sistema linfático. Se propicia de este modo llegar a instancias mucho más graves que pueden derivar en desenlaces fatales a temprana edad.Es así como hay estudios estadísticos que muestran que los efectos colaterales de medicamentos son, a lo menos, la cuarta razón de muerte en los Estados Unidos, y podemos extrapolar esto a muchos otros países del mundo. Los pacientes muchas veces comienzan a tomar medicamentos para sanar enfermedades originadas por medicamentos anteriores. Nos encontramos así con un círculo vicioso y con una industria farmacéutica, que porfiíta excesivamente de la enfermedad humana y a la cual, desde esa perspectiva, no le conviene la salud.
Resumiendo, hemos destacado en esta página la importancia crucial que tiene el hecho de que sea el mismo paciente quien tome conciencia del origen psicológico y emocional profundo de sus enfermedades, y de la necesidad de cambios radicales en su conducta y visión de la vida. Sin esto cualquier mejoría se complica.Luego de iniciar este arduo proceso el paciente tiene que ser ayudado en la recuperación de su salud física también con otros recursos que la naturaleza le provee. Todavía no hemos llegado a valorar suficientemente la inteligencia curativa que subyace en muchos sistemas naturales de salud .

REIKI


: ¿Sufres estrés, ansiedad, dolores de espalda, falta de vitalidad...? El Reiki es una auténtica inyección de energía para tratar estos trastornos y recuperar tu equilibrioEl reiki consiste en canalizar la energía universal a través de las manos. “Tiene muchas aplicaciones: puede utilizarse para aliviar un dolor fuerte o crónico, para reducir el estrés o para reestablecer la armonía”,La técnica surgió en Japón a finales del siglo XIX y actualmente se practica en todo el mundo. La Organización Mundial de la Salud lo ha reconocido como terapia alternativa, y en países como Inglaterra, Alemania y Estados Unidos es frecuente ofrecerlo como tratamiento, y también se aplica en los hospitales para paliar las molestias de las personas ingresadas.El reiki trabaja con la energía universal, la misma que la medicina china llama ‘chi’ o que los hindúes conocen como ‘prana’. Parte del principio de que, cuando nuestra energía se encuentra en equilibrio, el organismo está sano y alejado de la enfermedad. Por eso, el objetivo del tratamiento es recobrar la armonía física, mental y espiritual, como ocurre con el shiatsu, la acupuntura o el ayurveda.El reiki puede ser compatible con la medicina tradicional o con las terapias psicológicas. De hecho, a menudo es un complemento excelente: “Nunca interfiere. En todo caso, acelera los procesos de curación y puede ser necesario modificar la medicaciónUn tratamiento de reiki comienza cuando el paciente entra en la consulta y se tumba en una camilla, dispuesto a pasar unos 50 minutos en estado de relax. No hay que quitarse la ropa, pero sí las joyas. El terapeuta coloca las manos en los puntos energéticos del cuerpo (básicamente, los que coinciden con los chakras) durante varios minutos. Así recorre el cuerpo de la cabeza a los pies. Mientras, el paciente sólo tiene que relajarse y respirar pausadamenteDurante el tratamiento se pueden experimentar distintas sensaciones: frío, calor, cosquilleo, relajación, ligereza... También puede que afloren emociones como alivio, tristeza, rabia, ganas de llorar o de reír. Lo más habitual es sentir una gran relajación y descanso. Incluso, algunas personas se quedan dormidas. Todas estas sensaciones ocurren porque la energía fluye: “equilibra el sistema energético, suelta tensiones y estrés, alivia dolores y activa la capacidad del cuerpo para sanarse”.Después del tratamiento, la sensación es parecida a despertarse de un sueño profundo y renovador: la persona se siente vital, relajada, centrada y con las energías renovadas. Sin embargo, puede que unos días más tarde sienta cierto malestar: recuerdos que se reviven, sudor, mal humor, erupciones cutáneas... Pero eso es buen síntoma: significa que algo se está renovando por dentro y que el malestar que albergaba está aflorando a la superficie para ser eliminado.Sin embargo no hay que asustarse, ya que la sensación remitirá con el paso de los días y acabará convirtiéndose en bienestar. Se recomienda realizar tratamientos de cuatro sesiones como mínimo. “Suelen bastar para tratar problemas de estrés, tensión, ansiedad, insomnio, etc. Pero el número de sesiones depende siempre de cada persona, ya que no es lo mismo una enfermedad crónica que un problema de estrés en el trabajo”